La historia trataba de un granjero que se estableció en Africa, este granjero había oído hablar acerca de los relatos emocionantes, de otros colonos que habían hecho sus fortunas descubriendo minas de diamantes. El granjero en cuestión ardía de impaciencia por vender su granja para buscar diamantes el mismo, paso el resto de su vida errando por el basto continente africano buscando sin éxito las brillantes gemas que se cotizaban a un alto precio en el mercado mundial, finalmente en un arrepentido ataque de abatimiento desesperado y en la ruina se tiro a un río y se ahogo.

Mientras tanto el hombre que le comprara la granja encontró un día una piedra grande y rara aya por el arroyo que corría por el medio de su finca, la piedra la piedra aquella resulto ser un gran diamante de enorme valor y el hombre descubrió que la granja estaba cubiertas de ellas y llego a ser una de las minas de diamantes mas ricas de todo el mundo.

El primer granjero había poseído literalmente un campo de diamantes mas lo había vendido prácticamente por nada para ir a buscarlos a otros campo, si hubiera tomado su tiempo para estudiar y saber como eran los diamantes en bruto y hubiera explorado la tierra que tenia se hubiera hallado los millones que buscaba allí justo dentro de los contornos de su propiedad.

Lo que afecta profundamente a las personas es que cada uno de nosotros esta en este momento parado en medio de sus propias hectáreas de diamantes, si solamente tuviéramos la sabiduría y la paciencia de explorar el trabajo nos daríamos cuenta de las veces que se nos pasan oportunidades por la vida por no saber las ver

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